Una parte importante en la limpieza de oficinas, comunidades y en el hogar es el suelo. Es la zona que más suciedad acumula por la suciedad que entra de la calle o la que levemos en el calzado por lo que es necesario hacer una buena limpieza de suelos. Pero las baldosas no son tan difíciles de limpiar, solo se necesita un poco de agua con jabón y un cepillo, esto nos permite limpiarla fácilmente.
Otro caso diferente son los suelos de madera y las tarimas flotantes que requieren más cuidados ya que no se pueden mojar demasiado. Aquí van algunos trucos para limpiar las juntas de algunos de los suelos más habituales:
- Suelos de cerámica o azulejos: este tipo de suelos se limpiar fácilmente con agua caliente, primero hay que barrer o aspirar para eliminar la suciedad que pueda tener. Con un trapo de micro fibra se puede recoger toda la suciedad que pueda quedar de forma fácil. Para las juntas lo mejor es utilizar un cepillo pequeño y frotar.
- Suelos de madera: para este tipo de suelos se puede emplear agua hirviendo y té, el ácido tánico del té generará brillo en esta superficie. El paño utilizado tiene que estar húmedo, lo que permitirá que el suelo se seque rápidamente y brille en poco tiempo.
- Suelos de vinilo: para este tipo de suelos se puede emplear una mezclar de bórax y agua tibia para lavar el suelo. Con este truco en pocos minutos el vinilo quedará completamente limpio y brillante.
Son trucos sencillos que nos pueden ayudar en la limpieza de suelos. Para un mejor resultado puedes contratar empresas de limpieza que realizarán este trabajo de forma profesional. Confía la limpieza de empresas a Limpiezas Garro.